Sí ... Yo también quiero un amor de peli...
Sí, yo también quiero un amor
de pelí.
Quiero un galán alto y
fuerte, que sea todo un caballero. Uno que todas las mañanas me diga suavecito:
Te quiero. Que me abrace fuerte, fuerte y que me dé un beso largo antes de
irse a trabajar.
Quiero que me diga que me veo
linda, hermosa; que extraña cada minuto mi presencia y que le hace falta oír el
timbre de mi voz; uno que me acompañe a dar un paseo por el parque, o
simplemente a pasear a la mascota o a tomar un café en un balcón.
Quiero uno que me tome de la
mano, que me presuma por la calle, que no le importe si por donde pasemos hay cinco
chicas guapas o diez mil; uno que diga: Ésta es mi mujer. Si estoy con ella, no
necesito a nadie más.
Quiero uno cumplido y
cumplidor. No necesita ser precisamente guapo ni tampoco fortachón; pero eso sí,
que no sea feo que espante o que tenga una panza que ¡Válgame Dios!
Quiero uno que sea limpio,
honesto y trabajador; que no llegue a deshoras de la noche, sucio, enojado y
oliendo a alcohol. Que si llega cansado o fastidiado, en la casa me encontrará
presta para atenderlo, para darle mil horas de pasión.
Quiero uno detallista que me
abra la puerta del auto, que jale la silla cuando vamos a un restaurante, que
cargue mi bolsa y la sombrilla o el paraguas, que empuje el carrito del super,
que baje las bolsas del auto, que lo maneje para mí y que al final me pregunte:
¿Hay algo más que pueda hacer por ti?
Quiero que sea tierno,
atento, amable, que sepa acariciar y conozca todas las reglas del amor. Uno, al
que yo le parezca la más bella entre las bellas, y que si no tengo un cuerpo
escultural, me encuentre siempre atractiva y deseada, que yo le enseñaré lo que
le haga falta de las artes del amor.
Quiero que mi amor de pelí dure
toda la vida y que cada día tenga un final... Lleno de pasión.
El Único
Fuiste el único caballero
que me tomó de la mano.
Que pasó su brazo por mi
cintura,
sin apretar demasiado.
Fuiste el único
que me pidió un beso,
y que no se molestó,
al negárselo.
Fuiste el único
que no me pidió todo.
Pero al que todo le di.
Precisamente por eso.
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